Hoy hablaremos de una de las especies de tortugas más amenazadas y vulnerables del planeta. Nos referimos a la tortuga mora. Su nombre científico es Testudo graeca y su lugar de origen abarca una gran variedad geográfica repartida por más de tres continentes. Esto hace que su condición de existencia le haga tener numerosas subespecies. Esta tortuga está creciendo en demanda por aquellos amantes de las tortugas como mascota.
Si quieres conocer todo lo relacionado con esta especie, este es tu post 🙂
Características principales
La tortuga mora es pequeña de tamaño, tan sólo llega a medir unos 20 centímetros de largo. Esto lo hace ser una mascota ideal. Hay algunos ejemplares que pueden llegar a 30 cm, pero no suponen un problema. La coloración no suele ser brillante, pero al ser más variable la hace más atractiva.
La característica más especial que posee son sus spurs. Se trata de dos tubérculo de pequeño tamaño que se sitúan en sus muslos, uno a cada lado de la cola. Hay una gran variedad de subespecies de esta tortuga y se diferencian principalmente en su tamaño, peso y coloración. Si queremos identificar un espécimen individual se necesita conocer su lugar de origen para concretar mejor sus características.
Casi todos los grupos tienen el caparazón rectangular y con una coloración que va desde el marrón oscuro hasta el amarillo más brillante. Los acentos oscuros son variables en cada subespecie. Algunos tiene unas pocas manchas, otros en muchos lugares y algunos llegan a tener hasta parches sólidos.
Algunas subespecies con el paso de los años han conseguido desarrollar una flexión en los bordes del caparazón. Su cabeza es de color oscuro y suele tener marcas totalmente simétricas en la parte superior.
Hábitat y área de distribución
La tortuga mora fue descrita por científicos por primera vez en el año 1758. Su área de distribución comprende todas las zonas entre el sur de España, Europa del Este, África del Norte, y partes de Asia, especialmente del Medio Oriente. Esto le hace tener gran variedad de subespecies, puesto que en cada clima y hábitat se desarrollan algunos órganos diferentes.
Se encuentran en ambientes muy variables que van desde una duna de costa hasta estepas rocosas de montañas. Sus lugares favoritos son aquellos que tienen temperaturas altas, son secas y áridas. En verano, cuando aumentan las temperaturas, les encanta tomar el sol para disfrutar tranquilas.
No habitan zonas con mucha vegetación, por lo que son fáciles de ver a simple vista.
Alimentación de la tortuga mora
Si estas tortugas se tienen como mascota, hay que tener en cuenta que su dieta debe ser alta en fibras, baja en proteínas y ricas en calcio. El estómago de las tortugas, por lo general, no está preparado para asimilar grandes cantidades de proteínas. Por ello, aunque las veas alimentarse con impaciencia de ensaladas mixtas de verduras y hortalizas, no se le debe ofrecer mucha carne. Si quiere variar su dieta se le puede dar hierba, dientes de león, heno y opuntia. Además, darle un poco de suplemento mineral y vitamínico con calcio puede ser una buena idea para fortalecerla.
Si se le da un hueso de sepia, la tortuga puede regular sus cantidades de calcio en el cuerpo. Como no todas las tortugas se comen el hueso de sepia, es más recomendable añadirle el suplemento en las ensaladas.
Si queremos que su salud sea óptima, no debemos alimentarla con muchos frutos. Algún que otro trozo de melón, manzana y otras frutas con agua para el verano son una buena opción. Solamente se les puede alimentar con frutas cada dos semanas o más.
Si logras mantenerlas saludables, estas tortugas envejecerán contigo y probablemente mueras antes que ellas, ya que se han analizado algunos ejemplares con más de 100 años.
Cuidados necesarios
Entorno
El entorno donde la tortuga vive debe simular las condiciones naturales. Es decir, ambientes cálidos y secos. Si la región donde vives es húmeda, hay que extremar la precaución cuando se saca al exterior. Si continuamente está expuesta a humedades altas, tendrá problemas serios de salud y morirá.
En cuanto a su hogar, necesitan un recinto de unas dimensiones de 120x60cm por cada individuo. Para el sustrato puedes utilizar una mezcla de arena y musgo de turba. Se mezclan en proporciones de tres a uno respectivamente. Si quieres proporcionarle un refugio para simular aún más sus condiciones naturales, puedes utilizar hierba de heno amontonada. Es importante que el sustrato se mantenga seco, ya que son sensibles a la humedad.
Para aportar el calor que tanto necesitan, utilizaremos una bombilla en una lámpara superior. Se debe situar a unos 30 centímetros de altura para que proporcione una temperatura de unos 32-35 grados. Gracias a estas temperaturas altas, la tortuga se sentirá como en casa.
Son tortugas bastante tímidas por lo que darles la opción de refugiarse es bueno para que ellas se sientan seguras en todo momento. Añade algunos trozos de corcho o madera u hojas de plátano al sustrato para que ella se haga su propio refugio. De esta forma se sentirán completamente seguras. Los refugios además deben estar ubicados en el extremo más frío del recinto y no directamente bajo las lámparas que emiten calor.
Manipulación
Al tratarse de tortugas tímidas es importante que se le ofrezcan los refugios mencionados. Además, hay que gastar cuidado al manipularlas ya que no les gustan (a la mayoría de las tortugas no les gustan que las cojan continuamente).
Cuando se sienten estresadas o asustadas se retiran en su caparazón y permanecen encajadas con sus grandes patas. Las escamas que cubren su cabeza son su forma de defenderse ante ataques. También hay que decir que no todos los ejemplares son tímidos. Hay algunas bastante extrovertidas que se han criado en cautividad desde que nacieron. Estas especies están totalmente adaptadas a la interacción de los humanos a diario.
Reproducción
Por último, la tortuga mora se reproduce en primavera y prepara su nido un par de semanas más tarde. Por cada puesta colocan hasta 12 huevos. Mientras algunos preparan un nido bastante formado, otros espolvorean un poco de tierra en los huevos.
Como podéis ver, esta tortuga es muy demandada como mascota y sus cuidados, aunque algo más exigentes, son perfectos para disfrutar de ella.