La tortuga sulcata es una especie bastante atractiva como mascota. Ello se debe a su temperamento agresivo, pero gracioso. Se han convertido en toda una buena opción para los amantes de las tortugas. Su nombre científico es Centrochelys sulcata y provienen de África.
¿Te gustaría conocer toda la biología, comportamiento y cuidados de esta especie? Sólo tienes que seguir leyendo 🙂
Comenzamos describiendo a esta tortuga por su caparazón. Es de color amarillo en el centro de cada escudo. A su vez, cada escudo que lo compone, dispone de numerosos anillos de color marrón. Por otro lado nos encontramos con el plastrón de color marrón claro o amarillo. Sin embargo, en esta parte no tienen marcas de otro color.
Por lo general, tienen una piel bastante gruesa y las patas llenas de proyecciones vertebrales. hay una curiosidad en el aspecto de esta tortuga. Y es que cuenta con unos espolones en las patas traseras, pero que no tienen ninguna función. Es como si las tuviera por su aspecto.
El ritmo de crecimiento es muy rápido. Son capaces de alcanzar hasta los 85 cm de longitud en su caparazón. En cuanto a su peso, se han encontrado machos que han llegado a pesar 100 kg. Estas dimensiones hacen que sus cuidados en cautividad sean algo más laboriosos. Lo analizaremos más tarde.
Hábitat y área de distribución
La tortuga sulcata es superada en tamaño por las Galápagos. Su hábitat natural se encuentra en las regiones más áridas y cálidas de la zona subsahariana. No son buenas viviendo en lugares con temperaturas más bajas y alta humedad ambiental. Prefieren tomar el sol y el calor para mantenerse saludables.
Sin embargo, hay periodos en estas zonas con extremo calor y muy pocas lluvias. Esto hace que gran parte de las poblaciones de tortuga sulcata vivan bajo tierra durante unos meses. Así les ayuda a contrarrestar estos episodios tan extremos. Las madrigueras se pueden mantener algo más frescas y les añade algo de humedad para evitar la deshidratación. Aunque no les guste la humedad en exceso, si que la necesitan para poder hidratarse.
La forma de meterse en sus madrigueras es denominada estivación. No tiene nada que ver con la hibernación.
Alimentación
Para criar en cautividad, el heno y la hierba son excelentes alimentos para dar a nuestra mascota. Suele tener un apetito enorme y los alimentos hay que dárselos en cantidades considerables. De lo contrario siempre estará pasando hambre.
La dieta para que su salud esté firme debe ser alta en fibra y calcio y baja en grasas y proteínas. Recordamos que los estómagos de las tortugas no están preparados para procesas grandes cantidades de proteínas.
Se puede comparar la tortuga sulcata salvaje a una vaca u oveja. Esto se debe a que pastan la hierba de manera similar. La gran diferencia es que la vegetación del desierto es de mala calidad y muy gruesa. Al tener una mala calidad nutricional la dieta natural, si le damos algo de mayor calidad, generará problemas. Es posible que comiencen a salir malformaciones en la cáscara, tener una tasa de crecimiento excesiva y tener diarrea.
El heno de hierba o heno de escamas es lo más semejante a la vegetación natural de la especie. Pueden ser comprados en el mercado, al igual que la semilla de la hierba de pasto, para su siembra y posterior consumo por parte de la tortuga.
Podemos darle pequeña cantidades de frutas como plátanos, fresas, manzanas y melón. Para mantenerlas siempre fuertes, es necesario darles con regularidad un suplemento de calcio para completar su dieta.
Como os habréis dado cuenta, este animal es herbívoro, por lo que no se le debe alimentar con nada de carne.
Temperamento y agresividad
Vamos a hacer un hincapié especial en su temperamento por ser la razón que la hace famosa. Cuando las crías de esta especie están creciendo se les tiene que evitar juntar con más de un macho. Tanto ellos como las hembras tienen un comportamiento muy agresivo. Los machos alcanzan la madurez sexual más o menos cuando tienen una longitud de 35 cm del caparazón. Son agresivos porque intentan embestir a otros machos para voltearlos. Esto hace que tener varios machos en el interior del recinto pueda ser peligroso.
Por lo general, les encanta cavar, escalar y vagar y buscan alimento. Este comportamiento les hace ser muy atractiva para tenerlas de mascota. Son bastante fuertes, lo suficiente como para derribar vallas. Se sienten atraídas por objetos brillantes e intentan ir a su dirección. Esto da mucho juego para entretenerse con ellas y estrechar vínculos.
Cuidados necesarios de la tortuga sulcata
Hay algunos aspectos que hay que tener en cuenta para tener una tortuga sulcata en cautividad.
Manipulación
Lo primero es saber que hay que manipularas con mucho cuidado cuando son pequeñas. Cuando crecen, su manipulación se vuelve complicada a causa del tamaño y el peso que adquieren. Por ello, no se debe intentar manipular los ejemplares adultos.
Si por alguna razón se necesita mover la tortuga de sitio, es mejor emplear una flor comestible de color brillante como señuelo.
Recinto y hábitat
Estas tortugas se pueden mantener tanto en viveros como acuarios secos. Cuando se hacen adultos, es mejor tenerlas en el exterior o tenerles un recinto grande para que se pueda mover.
Si el clima de tu zona no es tan cálido, deberías añadir una lámpara incandescente para darles calor. Además le aportan vitamina D. La luz UVB, como la solar, es necesaria para que las tortugas produzcan la vitamina D, que las ayuda en la sintetización de calcio, indispensable para el crecimiento sana y fortalecimiento de los escudos del caparazón.
Algunas características
El sustrato de la vivienda para tortugas tiene que ser de mezcla de tierra y arena. Esto se hace para que pueda cavar y realizar sus actividades.
La temperatura diurna debe ser entre 24 y 38 grados. Por debajo de 21 grados no pueden pasar la noche. Necesitan una limpieza regular de sus heces ya que, tras su enorme voracidad, va a procesar gran cantidad de alimentos.
Por último, necesitan un estanque de agua poco profunda en todo momento. Sin embargo, es necesario que tenga una parte donde ella pueda entrar y salir con facilidad, puesto que no puede nadar.
Con estos consejos podrás cuidar de una forma correcta a tu tortuga sulcata 🙂